La industria de la hospitalidad actualmente se encuentra expuesta a una red cada vez más sofisticada de personas que se dedican a estafar clientes de los hoteles mediante el robo de tarjetas de crédito ya sea en forma física o digital. Para prevenir que esto suceda se debe conocer en primer lugar cómo operan los estafadores y luego adoptar las medidas necesarias a fin de evitar inconvenientes para la empresa y los huéspedes
Las tarjetas de crédito constituyen el blanco ideal para estafadores y piratas informáticos, cuyos métodos han evolucionado de manera acelerada en los últimos tiempos para obtener beneficios económicos a expensas de sus víctimas, atacando al sector hotelero por la gran cantidad de clientes con que cuentan.
Antes de realizar cualquier tipo de transacción es importante la recolección pasiva de datos personales y analizar el patrón de comportamiento del cliente ante las consultas. Esto se debe a que en ocasiones los estafadores para comprobar si una tarjeta robada todavía se encuentra activa, realizan varias reservaciones en los hoteles para obtener una autorización, generando altas tasas de no shows y la pérdida de ingresos por oportunidades de venta perdidas.
La tecnología facilita los procesos tradicionales de control con la ayuda de aplicaciones, desde las cuales uno puede registrarse de manera digital y eludir por completo la recepción utilizando la app móvil del hotel como clave de la habitación. El peligro es que puede ser usada por los estafadores con credenciales robadas para iniciar sesión en la cuenta de un cliente y reservar una habitación de hotel con una tarjeta en el archivo.
Por otra parte, los dispositivos electrónicos o skimmers que leen la banda magnética de la tarjeta, también son empleados por los defraudadores mediante dispositivos que realizan una copia electrónica de la tarjeta y los transfiere a una computadora en blanco para efectuar los cargos fraudulentos.
Para evitar correr riesgos es necesario implementar estrategias integrales y herramientas dinámicas que contribuyan a detectar y eliminar cualquier tipo de irregularidades. De igual manera los clientes deben ser conscientes de la problemática, tomando los recaudos pertinentes para no comprometer su información personal y bancaria.
Teniendo en cuenta la forma en que operan los timadores será posible adoptar una táctica efectiva con miras a brindar mayor seguridad en los hoteles, resguardando los datos de sus clientes.
Dejar un comentario