Si el gobierno de la ciudad aprueba esta nueva reglamentación, se prohibiría permanentemente a los propietarios alquilar habitaciones privadas para estancias cortas. Los particulares podran alquilar habitaciones en su propia casa sólo para estancias de 30 días o más.
El plan se suma a otras medidas de la ciudad para limitar las viviendas turísticas, como las ofrecidas por Airbnb. Si se adopta esta nueva reglamentación, la ciudad tendría algunos de los controles más estrictos sobre alquileres vacacionales de cualquier ciudad del mundo.
Fuente: Bloomberg
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