Para el grupo, el resurgimiento de la industria se está manifestando, principalmente, por el regreso paulatino de los traslados de negocio y el turismo doméstico, en un contexto donde el 46% de los consumidores a nivel global, se sienten más cómodos viajando durante este año, que en el 2020.
Prueba de ello es que a partir de abril del 2021, las consultas por viajes han aumentado, situación que también se expresa en el website de la compañía, all.accor.com, que ha registrado desde la misma fecha un mayor número de reservas hoteleras, tanto en Brasil como en el resto de los países hispanos, siendo julio el mes con mayor flujo desde el inicio de la pandemia.
Según datos de McKinsey y Cia, Sudamérica alcanzaría este 2021 una reactivación de los viajes del 62% en relación al 2019, ofreciendo buenas perspectivas de ocupación tanto para los hoteles de Accor que cerraron sus puertas durante la crisis sanitaria, como para los que se mantuvieron funcionando con restricciones.
En este escenario, Accor ya dio paso a la reapertura de Novotel Viña del Mar, ibis Puerto Montt e ibis budget Iquique y, desde el 01 de septiembre, a la de ibis Valparaíso en Chile, una alternativa económica que permite recorrer uno de los atractivos destinos turísticos del país.
También reanudó las operaciones del Mercure Montevideo en Uruguay y de ibis Congreso en Argentina, hotel que complementará la oferta de Novotel Buenos Aires y Sofitel Recoleta en la capital porteña. Dentro del extenso portafolio de propiedades y marcas de Accor, otros hoteles que esperan el retorno de los huéspedes son Novotel Lima San Isidro y Mercure Ariosto Lima de Perú, ideales para viajeros que buscan experiencias auténticas y locales.
En Colombia, ibis Bogotá Museo, como una alternativa dinámica y económica abierta a todos, y Novotel Bogotá Parque 93 o Mercure Bogotá, como opciones de gama media.
A ellos se suman ibis Asunción en Paraguay, Mercure Quito en Ecuador y Swissoôtel Santa Cruz de la Sierra, el primer hotel de Accor en Bolivia enfocado en el segmento de lujo y que, gracias a su categoría, ofrece a los huéspedes la posibilidad de permanecer largas estadías, integrando en un solo viaje actividades de negocios y de placer. Una propuesta que el grupo ha difundido en el mercado bajo el concepto de “Bleisure”, combinación de “business” y “leisure”, en inglés.
“En todos los países la situación sanitaria está evolucionando positivamente, aunque sabemos que aún es frágil. Cada vez, vemos más clientes que, por razones de placer o de negocios, están volviendo a nuestros hoteles. De hecho, acabo de retomar el trabajo en terreno, visitando algunos en Colombia y Perú, para reunirme con los equipos y ha sido un gran reencuentro. Realmente no hay cómo pensar que lo digital pueda sustituir al contacto humano presencial y a una acogida calurosa, propia de los servicios de hospitalidad”, señaló Franck Pruvost, COO de Accor para países hispánicos.