Con miras a el reinicio de las actividades turisticas en todo el Paraguay (excepto, Asunción, Gran Asunción y Alto Paraná, zonas donde se concentran la mayor cantidad de hoteles de el país) la Senatur recientemente presentó la aprobación de cuatro protocolos trabajados en conjunto con el sector privado, que son de alojamiento, gastronomía, de destinos turísticos y de reuniones, cuyo pedido de homologación internacional permitirá a Paraguay obtener el sello de SAFE TRAVEL otorgado por el WTTC, muy importante para transmitir la tranquilidad a nuestros potenciales visitantes. Pero, ¿estar en la fase 4 con turismo interno será suficiente para los hoteles?
“Tenemos muy en claro (que a pesar de pasar a la fase 4) la demanda será nula y que la cantidad de pasajeros será muy por debajo de lo que veníamos recibiendo. Por tanto ya no podemos hablar de incertidumbre, las fronteras seguirán cerradas por lo menos hasta septiembre y hasta fin de año la ocupación hotelera no podrá repuntar.“, expresó a nuestro medio Cecilia Cartes, presidente de la Asociación Industrial Hotelera del Paraguay.
La industria hotelera del Paraguay no depende en su gran porcentaje de la demanda interna, sino de los turistas de negocios que vienen al país. Aunque algunos hoteles vienen trabajando como Hotel Salud, y continuarán mientras continuen los vuelos de repatriación y el Aeropuerto Silvio Pettirossi sin operaciones comerciales regulares, esto tampoco es suficiente para compensar la falta de turismo receptivo.
“Desde AIHPY impulsaremos – con el apoyo de la Red de Emprendimientos Latinoamericanos PYMELA y la Red de Turismo Colaborativo – un programa de reactivación turística. En un trabajo coordinado por la Asociación y un equipo internacional de profesionales (Liderados por el Ingeniero Alberto de la Fuente – Presidente de Pymela) en áreas de marketing y estrategias de negocios, buscaremos crear las nuevas bases para el turismo de la nación post- covid, implementando innovadoras formas y herramientas que nos permitan atraer más y nuevos pasajeros que reactiven el sector y la economía nacional.“, añadió Cecilia.
Con un tráfico internacional inexistente e indefinido por el cierre del aeropuerto y las restricciones de viajes, no existe actualmente una línea a seguir que pueda marcar un lento reinicio de actividades para un sector que se encuentra rezagado en la ansiada cadena de recuperación y evidentemente constituye su último eslabón.
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